lunes, 13 de febrero de 2012

La factura eléctrica


En primer lugar, el consumidor no sólo paga en su factura por el consumo de energía (kWh) sino que en ella se aplican otros conceptos, como puede apreciarse en la figura siguiente.

En la factura se pueden encontrar conceptos como potencia contratada (kW), donde se incluye el pago del uso de las redes o peaje de acceso. Otro término que se incluye en la factura es el consumo o exceso de energía reactiva (kVArh) y por lo demás se incluye el alquiler de equipos de medida y los impuestos... Parece razonable ¿verdad?... Pues la cosa no se queda aquí.

El precio del término de energía, depende del horario en el que se produce el consumo, de manera que se cobra más caro en las horas punta, cuando es mayor la demanda, que en las horas valle. Luego hay que añadir el periodo llano...

El precio del término de potencia ofrece dos posibles penalizaciones: El recargo por no disponer de limitador de potencia (ICP)# y el régimen de facturación de los tres periodos#. Es decir, nada más por el término de potencia, la compañía eléctrica cobra en muchas ocasiones más de lo que realmente vende... ¿Por qué si pagamos por el uso de las redes?.

El término de energía reactiva, lo mismo que antes, si ya se paga por el uso de las redes, ¿por qué hay que pagar otra vez por el uso de la red? La normativa curiosamente ha encontrado explicación a este fenómeno argumentando que la energía reactiva podría producir distorsiones en la red... Este término puede llegar a suponer  el 20 o el 30% de la facturación.

Luego está el recargo del 20%# de lo que se haya cobrado por energía, por potencia y/o por reactiva. La causa: “no haber contratado con una Comercializadora de Mercado Libre”. Sobre este tema hablaré más adelante.

Luego está el impuesto electricidad conforme  a la Ley 66/1997 al que luego se le aplica el IVA.
En definitiva, ¿Alguien sabe cuanto pagamos los consumidores en nuestra factura eléctrica, sin tener en cuenta el déficit tarifario? ¿Alguien se lo ha planteado? ¿Y si ya pagáramos sobradamente ese déficit?

lunes, 2 de enero de 2012

El Déficit Tarifario

Antes de nada decir que este, es un asunto que va a cumplir 15 años y que se encuentra como saben muy politizado. Trataré de ser por tanto lo más objetivo posible.

La Wikipedia lo define como “... la diferencia entre lo que paga el consumidor en su factura y el coste reconocido por la compañía eléctrica....”. No está mal para empezar a matizar.

El término "Déficit Trifario" aparece en el año 2003 al amparo de la ley del sector eléctrico (ley 54/1997)  tras la deuda acumulada por la entonces creada "necesidad" de pagar los Costes de Transición a la Competencia que no fue otra cosa que una compensación a las eléctricas para supuestamente amortiguar (recuperar) las inversiones realizadas antes de la liberalización del sector.

Este hecho combinado con un fuerte crecimiento de la demanda y desde mi punto de vista, una fórmula equivocada, es lo que ha dado lugar a la creación del déficit tarifario.

¿Que por que equivocada? Pues porque no se basa en los costes de operación REALES de generación sino en lo que las eléctricas cobran  y he ahí la trampa: Lo recaudado por los consumidores (lo que pagamos en nuestra factura) no da para cubrir lo que las eléctricas dicen que les cuesta producir su electricidad.

Esta injustificada "errata" tiene su origen en la subasta trimestral CESUR (se le llama “subasta” pero en realidad no lo es) que se podría definir como una previsión de los precios de generación que hacen las eléctricas y que lamentablemente nuestros legisladores han ligado, a través de los peajes de acceso y las tarifas, a la factura que pagamos los consumidores.

Como se que el tema es arduo, extenso y complicado, solamente me voy a remitir a expresar libremente mi opinión (que para eso estça el Blog) y es que, el sector eléctrico necesita una reforma profunda para que desaparezcan las situaciones de privilegio en que se ha convertido el mercado eléctrico, o sea  su patronal UNESA formada por ENDESA, IBERDROLA, y 3 mas para que desaparezca el procedimiento de la CESUR y sobretodo se desvincule el mismo a la factura de los consumidores, y ello mientras que no exista un mercado libre real y efectivo, que mejore la competitividad y ofrezca oportunidades a los consumidores (...por aquello del interés general...) de elegir libremente con quien quieren ser suministrados sin que eso suponga un atraco a su bolsillo.
Por otro lado, nuestro Gobierno, a través de la CNE, ha realizado algo bueno en esta materia (no como en la moratoria a las primas renovables o el ATC...) y es que se han realizado consultas a las diferentes asociaciones profesionales para eliminar o reducir el deficit tarifario. Estas son las propuestas presentadas, por los distintos agentes tal y como los denomina el periódico cincodias:

jueves, 29 de diciembre de 2011

Para empezar, una de romanos


En muchos sentidos la organización política, social y económica de la antigua Roma tiene mucho que ver con la organización que vive nuestra sociedad en la actualidad. Desde varios puntos de vista (entre ellos el punto de vista energético) la sociedad romana vivía en un sistema insostenible.

La Historia, como nos la han descrito nuestros antepasados, ha dejado sucinta huella de lo que un día fue el “centro del Universo” cuyo sustento estaba basado en lo que conocida y abiertamente era agotable, y claro,  como no podía ser de otra manera, un día se acabó.

Roma debía su grandeza a sus brillantes conquistas militares. Con cada conquista que realizaba, el tesoro de Roma crecía y crecía, y llegó a hacerlo hasta tal punto que un día hasta se pudo eximir de impuestos a los ciudadanos. Primero Macedonia, luego varias regiones de Hispania, cayó Ática hacia el 146 a.C., luego las Galias, Siria, etc., hasta llegar a Egipto. Las conquistas militares traían oro y riquezas que servían para financiar nuevas expediciones que a su vez traían más y más riquezas, recursos minerales, tierras donde cultivar, también traían mano de obra esclava; se disponía de nuevos bosques con madera, … en definitiva, existía un flujo cada vez mayor de energía disponible. Luego llegó el freno de la expansión: las primeras derrotas germanas y otros pueblos; y como prácticamente no había nada más que conquistar, Roma comenzó a defender la integridad de su territorio y comenzaron a construirse las grandes infraestructuras: murallas romanas, acueductos, calzadas, etc. Pero ya no llegaban los abundantes recursos como en épocas pasadas. Entonces Roma, que defendía sus intereses, se volcó con la fuente de energía que tenía más a mano: La Agricultura.

Con la agricultura comenzó la tala de bosques y se desarrolló  un importante sistema logístico, lo cual generó  riqueza durante un tiempo. Pero el ejército que había que mantener era demasiado costoso. Comenzaron a deteriorarse las infraestructuras creadas, que ahora eran más difíciles de mantener. Comenzaron los tributos aunque en algunos casos y debido a las extensas distancias que había que recorrer, resultaba más caro mantener el territorio que la riqueza que este generaba. La estructura militar no tardó en mostrar su descontento con la nueva situación y a la vez que se presionaba fiscalmente más a los ciudadanos y se les pedía un mayor esfuerzo a los esclavos, aparecieron numerosos casos de corrupción entre los gobernantes. Los agricultores, situados en tierras alejadas de Roma pagaban altísimos tributos  que apenas les permitía sustentarse y mientras tanto en Roma, se recortaban cada vez más asistencias sociales. Y eso que se venía de una época en la que prácticamente la tercera parte de Roma, recibía alguna asistencia pública alrededor del año 50 d.C.

Se abandonaron las tierras de cultivo. Algunas eran lagunas desecadas que al ser abandonadas volvieron a inundarse, propiciando así la aparición de plagas como la Malaria. A su vez, ya no llegaba suficiente alimento a la población que ya no disponía de la beneficencia pública y comenzó a enfermar y a morir. Se produjo una fuerte emigración de las tierras periféricas hacia Roma, dando lugar a grandes aglomeraciones en los barrios que a su vez provocaba que la plebe enfermara con mayor facilidad. Así hemos llegado a Nerón: Séneca recibe orden de suicidarse y arde Roma. (…/…)



Fuentes:                                                                                             
   1. "La economía del Hidrógeno", Jeremy Rifkin
   2.  Enciclopedia "EL PAIS". Ed. Salvat
   3.  Wikipedia  (http://bit.ly/rM7Wj5 )


sábado, 12 de noviembre de 2011

Bienvenid@s!

Gracias por tu visita.

El presente Blog pretende ser un medio de difusión de acontecimientos, curiosidades, noticias, reivindicaciones, etc... sobre el desarrollo del sector energético en España y en el resto del mundo.

No quiero ocultar mi apuesta por las energías renovables. Sin embargo, trataré de ser lo más objetivo posible en el planteamiento de cuantas cuestiones vayan surgiendo a lo largo de los próximos días, y para ello comenzaré relatando algunos acontecimientos históricos, que intercalaré con las eventuales noticias relacionadas con la materia. Espero que guste ;D.

Sin más, gracias de nuevo por tu visita.